THE FLOWER OF LIFE, 2025.

In this work, the cosmos and the human experience merge into a single visual symphony. The Flower of Life is not merely a painting — it is a metaphysical portal. The composition juxtaposes the organic and the mechanical, the earthly and the celestial, suggesting that existence is a dance between creation and entropy.

The central blooming flower becomes the axis mundi — the world’s spiritual spine — from which all life emanates. Around it, figures in motion evoke both ritual and transcendence, their faces masked, reminding us of the many roles we inhabit in the theater of existence. The scattered fragments of classical sculpture, the presence of cosmic elements, and the suggestion of movement invite the viewer to meditate on time: how civilizations rise and fall, yet the essence of life continues to renew itself.

The vibrant surrealism, charged with symbols of fertility, metamorphosis, and duality, urges us to confront the infinite cycle of birth, death, and rebirth. The Flower of Life asks the viewer to participate, to step through the portal and embrace the mystery of existence with courage and curiosity.

Call to Action:

Take a moment to look closer, to lose yourself in its details, and to rediscover the profound rhythm that connects you to all living things.

En esta obra, el cosmos y la experiencia humana se funden en una sola sinfonía visual. La Flor de la Vida no es solo una pintura: es un portal metafísico. La composición yuxtapone lo orgánico y lo mecánico, lo terrenal y lo celestial, sugiriendo que la existencia es una danza entre la creación y la entropía.

El Lirio que florece en el centro se convierte en el axis mundi, la columna espiritual del mundo, de la cual emana toda la vida. A su alrededor, las figuras en movimiento evocan tanto el ritual como la trascendencia; sus rostros enmascarados nos recuerdan los múltiples papeles que habitamos en el gran teatro de la existencia. Los fragmentos de escultura clásica, la presencia de elementos cósmicos y la sugerencia de movimiento invitan al espectador a meditar sobre el tiempo: cómo las civilizaciones surgen y caen, pero la esencia de la vida continúa renovándose.

El vibrante surrealismo, cargado de símbolos de fertilidad, metamorfosis y dualidad, nos impulsa a enfrentar el ciclo infinito de nacimiento, muerte y renacimiento. La Flor de la Vida nos pide participar, cruzar el portal y abrazar el misterio de la existencia con valentía y curiosidad.

Llamada a la Acción:

Detente un instante, observa con atención, piérdete en sus detalles y redescubre el profundo ritmo que te conecta con todas las cosas vivas.